Mixturas hace referencia a mezclas. En nuestro caso, es un conjunto de pinturas con diversos temas, haciendo uso de diferentes de técnicas y con materiales hechos por nosotros mismos. Es una exposición que muestra lo que realizamos el taller de Técnicas de los materiales de la Academia de San Carlos que imparte la maestra y artista Noemí Hernández.
La exposición es un encuentro humano de géneros, de generaciones, de profesiones, de intenciones, de gustos y de pensamientos que sin importar cómo y en qué nos desempeñamos en la labor cotidiana, cada sábado en el taller somos manos que se manchan con pigmentos de colores y revuelven espesos aglutinantes para al final de la clase estrechase satisfechas por lo realizado.
La exposición se compone de 22 pinturas que contribuyen a la eterna discusión sobre lo que el arte es; realizadas por 11 almas quienes buscamos pintar desde la extensa hondura. Desde lo que cotidianamente es visible, desde la intuición abstracta, desde el trazo matemático o extrayendo la eterna fantasía que surge de una activa imaginación. Descubiertos y aventurados creamos por una extraña necesidad de aferrarnos a sacar lo que adentro nos palpita.
Mixturas es la revoltura de quehaceres y personajes, de soportes y de técnicas, de pensamientos e ideales. Somos menos crítica y más corazón. Buscamos los lienzos para llenar más con ganas que con egos. Defendemos más la esperanza de ser congruentes con nuestro espíritu y menos la de ser los obsesionados por alcanzar la perfección plástica, aunque, no mentiremos, sí la anhelamos.
Con nuestra unión aprovechamos nuestras múltiples diferencias con el fin de rescatar la armonía y convivencia del artista que se ha quedado arrinconada al surgir la competencia y el individualismo; tomamos las técnicas aprendidas y los soportes buscando comulgar pacíficamente sin intensión de saciar el hambre de la pretensión para en cambio, enriquecernos con cualquier oportunidad en la que podamos mostrar nuestro trabajo.
Con este encuentro también revelamos nuestro empeño por dominar otras posibilidades plásticas diferentes a las que ya usábamos. El resultado expuesto es la confrontación y la lucha para dominar un material nunca manipulado, pero que una vez experimentado, nos abrió espacio para las variantes y sus mezcolanzas: para adorar los óleos sobre hoja de oro y plata, para relajarnos con el pincel sumergido en jabón de cera y encontrar gusto a lo burdo de las texturas del encausto.
Así es que nos declaramos artistas por breves momentos, pero eternos en la labor. Estamos dispuestos a desarrollarnos y desenvolvernos en los espacios que lo permitan con el fin de extendernos más allá de nuestra corporalidad.
Mixturas, es la valentía para juntarnos, organizarnos y mostrar nuestro trabajo con la firme idea de hacernos más extensos al compartir y menos fugaces por no atrevernos.
Texto de Sandra Basurto Hernández
